Perú
Introducción
«Perú es un mendigo sentado en un banco de oro»En el año 2018, cerca de 32 millones de personas vivían en Perú, generando un producto interno bruto de 222 mil millones de dólares. Un ingreso promedio per cápita de poco más de US$ 6 000, según el Banco Mundial (2017), clasifica a Perú como un país de ingreso medio en el rango superior. Perú ocupa el puesto 89 en el Índice de Desarrollo Humano de las Naciones Unidas. Respecto de la esperanza de vida, el nivel de educación y el nivel de vida, el país está evaluado con un alto desarrollo humano. Sin embargo, el coeficiente de Gini de 43,3% (2017) deja en claro que existen diferencias de ingreso significativas en el Perú, aunque no tan pronunciadas como en otros países de América Latina.
En 2018, la tasa de comercio exterior fue de 49,0%. Las importaciones de productos y servicios sumaron poco menos de 53 mil millones de dólares y las exportaciones algo más de 56 mil millones de dólares. En el mismo año, la inversión extranjera directa en Perú ascendió a US $ 104 mil millones, lo que representa el 6% de la inversión en América Latina.
Perú ocupa el puesto 105 de entre 180 países en el Índice de Percepción de la Corrupción de Transparency International (2019), convirtiéndolo en un país con alta presencia de corrupción en el sector público. Según Human Rights Watch (2017), en los últimos años las fuerzas de seguridad han herido y asesinado repetidamente a civiles durante protestas contra grandes proyectos mineros y de infraestructura. Cabe señalar que la violencia ha disminuido recientemente. Sin embargo, los periodistas que investigan casos de corrupción por parte de funcionarios públicos y empresarios serían abrumados, intimidados y amenazados con demandas por difamación. Reporteros sin Fronteras destaca que en 2017 ningún periodista fue asesinado y uno fue arrestado en relación con su trabajo. En el ranking de libertad de prensa, Perú ocupa el lugar 85 entre 180 países.
En Perú, en el 75% de la población se recogen los residuos domésticos (2001), y alrededor del 15% de estos desechos son reciclados (2011). En 2015, el 89,9% de la población peruana tenía acceso a servicios básicos de agua potable, con una clara brecha entre áreas urbanas (94,6%) y rurales (72,4%). También debe tenerse en cuenta que solamente la mitad de las personas tienen acceso a fuentes seguras de agua dulce (50,2%). De acuerdo a los últimos números disponibles, el 81% de la población está conectado a un sistema de alcantarillado (2009).
Las emisiones peruanas de 2,0 toneladas de CO2 per cápita, se ubican por debajo del promedio mundial de 5,0 toneladas y del promedio latinoamericano de 3,1 toneladas per cápita.
Los desafíos de las empresas peruanas en relación a los derechos humanos / condiciones de trabajo, medio ambiente y corrupción se describirán en los siguientes capítulos. Además, se demostrará a modo de ejemplo cómo las empresas cumplen con sus responsabilidades corporativas en las tres áreas.
Derechos humanos
«En Perú no hay una discusión seria sobre derechos humanos»En las regiones mineras del Perú, en su mayoría pobres y de difícil acceso, chocan los intereses, muchas veces contradictorios, de los pueblos indígenas y de los operadores de las minas. En las innumerables pequeñas minas de oro, las condiciones laborales amenazan la salud y los métodos ilegales de trabajo y extracción están a la orden del día. Estos incluyen el uso indebido de mercurio y cianuro para la extracción del oro, pero también varias formas de trabajo forzado. En la minería industrial, que es manejada por grandes empresas, en su mayoría multinacionales, las condiciones de trabajo y las normas ambientales son generalmente mejores, pero también la gran minería posee un considerable potencial de conflicto. Disputas sobre la tierra y el agua, reubicaciones ilegales o involuntarias, la contaminación ambiental y el uso excesivo de la infraestructura local son solo algunas de las tensiones que una y otra vez desembocan en conflictos violentos.
Existen policías activos que -para mejorar su bajo salario estatal- trabajan para servicios de seguridad privada de las compañías mineras como segundo empleo. Esta doble función aumenta el potencial de conflicto con la población local, ya que da la impresión de que la policía solo representa los intereses de las compañías mineras y no está allí para proteger a los habitantes. Cuando las empresas contratan servicios de seguridad privados con policías activos, deben asegurarse de que se haga una distinción clara entre las diferentes funciones de los involucrados.
En lo que respecta al comercio de materias primas de la minería a pequeña escala, las empresas internacionales tienen la responsabilidad de garantizar que se respeten los derechos humanos y las normas ambientales a lo largo de la cadena de valor.
Medio Ambiente
«Solos, somos solo una vela, juntos brillamos mucho más fuerte»Perú es una de las regiones mineras más importantes del mundo. En muchos casos, la minería está asociada a una considerable contaminación y destrucción ambiental. Especialmente en la minería informal e ilegal a pequeña escala, el uso indebido de mercurio y otras sustancias tóxicas aún es muy generalizado. La consecuencia es la contaminación de ríos y aguas subterráneas, aire y suelo, que agobian o incluso destruyen para siempre los medios de subsistencia de los campesinos locales y los pueblos indígenas.
De parte del estado, hay pocos controles. Por un lado, apenas existen rutas de acceso a las minas, ya que estas se encuentran principalmente en áreas rurales remotas, y por otro lado, el estado y determinados funcionarios públicos se benefician económicamente de la minería. Por lo tanto, no tienen un interés particular en la implementación de controles estrictos.
Por lo mismo, las empresas son responsables de tomar medidas adecuadas para contrarrestar la degradación ambiental. Una iniciativa de desarrollo en el área de la minería a pequeña escala que se ha fijado el objetivo de hacer que la minería y el comercio de oro sea social y ecológicamente más sostenible, es la Iniciativa suiza Better Gold. Además de mejorar las condiciones sociales en las minas y cooperativas, así como de crear transparencia en la cadena de valor, la iniciativa apunta a reducir el uso de tecnologías perjudiciales para el medioambiente. Por ejemplo, hay varias formas de minimizar el uso del mercurio, por ejemplo, mediante el uso de vibradores que disuelven el oro de la piedra.
Corrupción
«La corrupción causa más daño que un desastre natural»La corrupción es un problema cotidiano también en Perú. Se observa en el soborno de policías en la esquina de la calle o en los controles de carreteras. En accidentes de tráfico, por ejemplo, se le da un soborno al oficial de policía responsable para “olvidar la causa” - “arreglar” es como se le llama en Perú. Pero también en el rubro de la construcción existen estructuras criminales, incluso mafiosas. Por ejemplo, las empresas realizan pagos informales a los trabajadores de la construcción para asegurarse de que a la mañana siguiente, los materiales de construcción, como madera, pintura y ladrillos, todavía estén allí y no hayan sido revendidos por los mismos trabajadores. Muchas empresas quedan involucradas en este ciclo corrupto, pagando para no correr el riesgo de quedarse sin materiales.
Entre tanto, hay más y más compañías que luchan contra la corrupción generalizada. Especialmente entre la nueva generación de jóvenes empresarios, la opinión común es que la corrupción no es una ofensa trivial y, a la larga, no habrá ganadores sino solo perdedores. Por ejemplo, ya no participan en licitaciones donde saben que no pueden continuar sin pagos informales. Quieren obtener sus pedidos de manera honesta.
Una alianza de empresas que unen sus fuerzas contra el círculo vicioso de las intrigas corruptas podría ayudar a abordar y enfrentar la corrupción a largo plazo en Perú.